el hotel estaba en el corazón de la ciudad. la habitación ofrecía una vista asombrosa al lago.

Vistas impresionantes del lago, pueblo tranquilo y encantador, habitación amplia, precio económico, parking gratuito al aire libre.

Nada para mí.

Lo mejor era la terraza y la mini nevera, y la posición del hotel, brillante. Estaba equipada con una bañera. Ubicación: el hotel estaba muy, pero que muy cerca del ferry y de restaurantes y tiendas y de la orilla del lago. Un gran bonus ha sido la cercanía al local Baeckerei Cafe Rathaus, que ofrece té y café.

A pesar de ser bastante promedio, la ubicación y la amabilidad del personal destacan, además la habitación tenía una vista increíble al lago.

Habitaciones recién renovadas con terraza, mini nevera y una cama súper cómoda. La ubicación es genial y el personal siempre está dispuesto a ayudar. Además, ¡estábamos a un paso del centro! 🌟

La ubicación de este hotel es simplemente espectacular. Está situado justo en el paseo marítimo, con vistas impresionantes al lago. Desde el balcón de nuestra habitación, pudimos disfrutar de paisajes de ensueño durante toda nuestra estancia. Además, el hotel ha sido recientemente renovado, lo que hizo que nuestra habitación estuviera impecable y con un toque moderno.

En general, nuestra estancia en este hotel fue perfecta. No encontramos ningún aspecto negativo que mencionar.

El hotel se encuentra justo en la orilla del lago, lo que proporciona unas vistas impresionantes. La habitación era amplia y el precio era muy económico en comparación con otros lugares de la zona. Además, hay un parking gratuito al aire libre justo cruzando la calle.

No obstante, el servicio no fue el mejor, ya que se notaba que algunos pequeños detalles eran descuidados. Por ejemplo, la papelera de la habitación olía a tabaco, a pesar de que nosotros no fumábamos.